TAMALES DE CHOCLO FRESCO

Si bien cada vez voy encontrando más localcitos étnicos o especializados, Buenos Aires tiene sus limitaciones a la hora de conseguir ciertos ingredientes.

Creo que dadas mis frecuentes incursiones al barrio chino, mercados y negocios de especias, mi alacena cuenta con muchos elementos considerados difíciles o inconseguibles localmente, tipo hojas de lima kaffir, ras el hanout y sumac, pero aún hay cosas que no puedo encontrar por más que camine y camine,  y googlee y googlee [¿tempeh? ¿aceite de coco? ¿amchoor?].

Hasta hace poco, la harina de maíz fina estaba dentro de la lista de imposibles y de repente, con enormísima felicidad, la vi en la góndola de Casa China. Y para colmo,  ya como para patotear, tenían tanto la blanca como la amarilla [claramente compré las dos].

¿Qué buscaba hacer tan ansiosamente con esta harina? Casi la mitad de los platos de la página de Rick Bayless, mi Top Chef Master preferido, pero, más puntualmente, tamales de choclo fresco. Que, para quienes quieran saber,  hice ya dos veces, y no una tercera [que hubiera hecho al día siguiente]  para no terminarme la harina tan preciadade golpe. Y que conste, sólo por eso.

Tamales de choclo fresco

[adaptada de Rick Bayless]

Ingredientes – para 3/4 personas

  • 3 choclos frescos grandes, con sus chalas
  • 1 y 3/4 tazas de harina de maíz amarillo fina [yo necesité un poco más], mezclada con 1 taza y 2 cucharadas de agua caliente, y luego enfriada
  • 100g de manteca a temperatura ambiente, cortada en cubitos
  • 2 cucharadas de azúcar
  • 3/4 cucharaditas de sal
  • 1 y 1/2 cucharaditas de polvo de hornear
  • 1 jalapeño asado, pelado y des-semillado, luego cortado en tiritas finas
  • 150g de queso que se derrita tipo cheddar o mozzarella, cortado en bastoncitos [yo los hice con queso azul, y me encantaron]

Preparación

Para ablandar las chalas: cortar la punta inferior del choclo [donde se une con el tallo] para soltar las chalas, y retirarlas con mucho cuidado, para que no se rompan. Hervir una olla con bastante agua y, cuando rompa hervor, retirarla del fuego. Poner las chalas dentro del agua y mantenerlas sumergidas con algo de peso encima, tipo un plato, un bol pesado, o similar. Dejarlas al menos 1 hora, luego colarlas y dejarlas secar un poco en el mismo colador.

Procesar los granos de choclo con la harina, azúcar, manteca, sal y polvo de hornear, 2 o 3 minutos, hasta que la mezcla esté homogénea y liviana. NOTA: No sé si será por la harina local o qué, pero a mí me había quedado demasiado líquida la pasta, y le agregué más o menos 1/2 taza más de harina. De todas formas, va a quedar más suelta que la masa de tamales hecha únicamente de harina debudo al choclo fresco.

Para armar los tamales: Si bien recomiendo fuertemente que vean este video [aunque no sepan inglés, es súper claro], paso a explicar. Tomar una chala [o dos un poco encimadas, si son muy chicas] y apoyarla sobre una mesada estirada de forma vertical, y rellenar con 1 y 1/2 aprox cucharadas de la mezcla. La mezcla debería formar un óvalo alargado, con al menos 3 cm de separación de los bordes.

Colocar una tira del jalapeño y uno o dos cubitos de queso sobre la mezcla de choclo. Cerrar la chala a lo ancho, colocando uno de los extremos adentro del otro [casi como enrollando], y apretando un poquito los bordes de la masa para encerrar el relleno. Después agarrar los extremos a lo largo, doblarlos, y colocarlos debajo del resto del tamal, armando un paquetito. Si quieren, pueden atarlo con un piolín o tiras de chala, aunque yo no lo hago porque los doblo bien cerrados. Hacer lo mismo con todas las chalas, hasta que no quede relleno. Guardar las chalas que sobren.

Preparar una olla con una vaporiera y un poco de agua, y cubrir la base de la vaporiera con la mitad de las chalas sobrantes. Colocar los tamales, bien apoyados, y cubrirlos con las chalas restantes. Tapar la olla y cocinar al vapor entre hora y hora y media. Es importante que vayan chequeando el agua y agregando si queda poca; agreguen agua caliente únicamente, para que no baje el calor de la olla.

Los tamales estarán listos cuando el relleno esté cocido y no se pegue a la chala. Dejar enfriar unos minutos, para que se endurezcan un poquito, y servir.

Si te gustó esta receta, pueden interesarte:

Quesadillas de ciudad de Mexico

Pastelitos de acelga y hierbas en masa filo

Categorías:Granos, cereales y legumbres, Hortalizas y hojas, Huevos, lacteos y tofu

Etiquetado como:,,

2 respuestas »

Deja un comentario